Ingredientes tan simples como la grava, el cemente, el agua y la arena se unen para dar a lugar a uno de los materiales de construcción más sólidos y versátiles: el hormigón. Actualmente, casi que no existe ningún proyecto arquitectónico que no incluya al hormigón entre sus materiales de construcción.
Aunque la composición es la misma, existen muchos tipos de hormigones ya sea por el método de fabricación u otros factores. Es esencial conocer a fondo las características de cada uno, sus beneficios y sus usos, para escoger el que más se acople a la obra que se desea ejecutar. En esta ocasión, te contamos todo lo que necesitas saber sobre el hormigón desactivado.
El hormigón desactivado (también conocido por los nombres de hormigón lavado y hormigón árido visto), debe su nombre a su proceso de elaboración, el cual permite dejar al descubierto el hormigón. En otras palabras, en la superficie del pavimento se pueden apreciar los componentes áridos del mismo.
¿Por qué querríamos que sean visibles los componentes del hormigón? Además de ser altamente estético y ser un hormigón que se puede instalar in situ fácilmente, no tiene un acabado liso sino más bien rugoso. Quiere decir que obtendremos un pavimento antideslizante y resistente.
Su método de elaboración único da como resultado un pavimento distintivo, con una superficie similar a la grava o piedra pero con las bondades del hormigón. Es definitivamente un tipo de hormigón que le aportará personalidad a cualquier proyecto, y que además es capaz de mezclarse con su entorno y parecer natural.
La creciente popularidad del hormigón desactivado se debe principalmente a sus características únicas y numerosas ventajas, que veremos a continuación:
Tanto el hormigón pulido, el hormigón impreso y el hormigón desactivado comparten la categoría de hormigones ornamentales y los tres son aptos para el uso de exteriores. Sin embargo, se destaca al hormigón desactivado no solo por su belleza inigualable sino por sus características particulares.
Estas características y ventajas hacen notoria la diversidad de usos que brinda. Se puede emplear tanto en construcciones viales como las aceras, calles, plazas, calzadas y vías de tráfico ligero como también en los exteriores de zonas residenciales, casas, jardines e incluso en caminerías para el área de la piscina.
Utilizando este hormigón en pavimentos para centros comerciales o terrazas se pueden construir diseños muy originales que le aportarán a la obra un sello distintivo y personalidad. El hormigón desactivado no solo es sumamente resistente y seguro para los viandantes, sino que además no admite el crecimiento de hierbas. Cosa que puede ser muy molesta y que arruina la estética de la obra.
Sin duda alguna, el hormigón desactivado puede emplearse en una diversidad de construcciones. Es un material que ha marcado tendencia, pero más allá de la moda y la popularidad, hay verdaderas razones de peso que respaldan su utilización. Se adapta a las necesidades del constructor sin perder de vista la importancia de la belleza y los acabados pulcros.
Aunque los ingredientes son los mismos con los que se elaboran los hormigones convencionales, la composición y el método de instalación difieren colosalmente. Para obtener un hormigón desactivado perfecto, es necesario seguir al pie de la letra los pasos de su elaboración, ya que son fundamentales para lograr la textura corrugada característica del hormigón lavado.
Para elaborar la mezcla, es necesario tener presente que según la utilidad que le demos, se determinará el espesor, armado y la resistencia del mismo. Normalmente, los valores de densidad varían en un rango de 21 a 23 kg/cm/m2 y el grosor de los áridos entre 1 a 2cm. Una vez lista la mezcla de hormigón, se deben seguir los siguientes pasos:
Entre la gran diversidad de materiales existentes que pueden usarse en la construcción, el hormigón es uno de los más económicos y asequibles para los constructores. Sin embargo, el hormigón desactivado puede ser considerado como uno de los más caros entre todos los tipos de hormigos que hay.
Su preció fluctúa principalmente gracias a tres factores:
Por todas las razones anteriormente expuestas, es probable encontrar en el mercado que el rango en el que oscila el valor del hormigón lavado es de 20 € a 60 € por cada metro cuadrado.
Como se mencionó anteriormente en otros apartados, el hormigón desactivado es uno de los que necesita poco mantenimiento. Especialmente porque se trata de un material con altos niveles de porosidad y rugosidad que no tienen otro tipo de hormigones (como el hormigón pulido, el cual demanda ser lustrado frecuentemente).
A pesar de ello, si lo que queremos es que nuestro pavimento esté como recién puesto a lo largo del tiempo, podemos realizar un mantenimiento periódico utilizando:
La grasa y la suciedad pueden ser los enemigos más audaces de un pavimento poroso y corrugado. ¿Por qué? simplemente porque la composición química de estos elementos les confiere la capacidad de penetrar en ese tipo de superficies con extrema facilidad.
Los selladores son unos productos químicos que se caracterizan por tapar o sellar los microporos de cualquier área. Una capa de sellador protegerá por más tiempo el manto externo del hormigón desactivado a su vez que simplificará su limpieza. Por otro lado, el uso de un sellador garantiza que los elementos áridos se mantengan en su lugar, sin sufrir ningún tipo de deformación.
Al momento de elegir el sellador, es importante mantener en cuenta que debe ser un producto resistente a los rayos ultravioleta, debe proveer una capa gruesa de brillo que enriquece y profundiza el color del agregado y por supuesto, que pueda ofrecer una barrera a sustancias oleaginosas como la grasa y el aceite.
La resina es otro agente químico que ayuda a mantener el hormigón intacto por más tiempo. Al igual que el sellador, las resinas influyen en la permanencia de los áridos pero también le aportan brillo y una protección perdurable. ¿Qué se obtiene con el uso de una resina? Un hormigón desactivado con un acabado elegante, lustroso e imperecedero.
Un constante mantenimiento para eliminar la suciedad y el polvo también contribuye a la longevidad de los pavimentos hechos a base de hormigón. Existe una variedad de desinfectantes manufacturados especialmente para ser eficaces en la limpieza de estas superficies. Es recomendable hacer uso frecuente de estos productos.
Con el paso del tiempo puede deteriorarse el color del pavimento, perder tono. Para remediar eso, es recomendable aplicar un potenciador del color. No solo estará previniendo que el color envejezca sino que además, la superficie del pavimento se hace aún más resistente a impactos o abrasiones.
Los pavimentos hechos con hormigón desactivado cuenta con una alta resistencia y capacidad antideslizante entre la infinidad de sus rasgos, cualidades que lo hacen ser confiable y funcional. Es por eso que la lista puede ser interminable si nos determinamos a copilar todos los lugares en los que se puede utilizar el hormigón lavado.
Es especialmente común ver su utilización en obras del sector público, ya que además de poseer los atributos mencionados anteriormente, su mantenimiento representa un costo mínimo de inversión. Las aceras, pasos peatonales, puentes, calzadas, calles, caminos de acceso, plazas públicas son unos ejemplos perfectos donde se puede aplicar este tipo de hormigón.
El hormigón desactivado es un material que puede acoplarse perfectamente a cualquier entorno o ambiente. Por eso, también es frecuente su uso en las zonas urbanas. Todas las ventajas de este hormigón pueden ser aprovechadas en paisajismo de exteriores, aparcamientos y zonas comunes de las zonas residenciales.
Por otro lado, la permanencia de todas las propiedades de este material en el tiempo y la calidad estética de sus acabados es la opción preferencial por constructores para ejecutar obras arquitectónicas de envergadura. Especialmente en sitios donde ocurren con suma frecuencia cambios bruscos en las condiciones climáticas como zonas de tráfico, rampas y áreas peatonales.