El hormigón es el material de construcción preferido de muchos usuarios y compañías. Esto se debe, principalmente, a que el hormigón es un material moldeable, versátil, resistente y duradero.
Existen diversos tipos de hormigones, como el hormigón armado, hormigón post-tensado, hormigón regular, hormigón impreso, etc., cada uno de los cuales varían en precio y en modo de aplicación.
Por ello, si deseas utilizar hormigón para llevar a cabo alguna obra de construcción, deberás saber escoger aquel que mejor se ajusta a tus necesidades, además que deberás conocer los precios por metro cúbico de cada tipo de hormigón. En el presente artículo te explicaremos lo que debes saber sobre el hormigón y cuál es el precio por m3 de este material.
Actualmente, la definición de hormigón es muy conocida entre los diversos constructores. En esencia, el hormigón es un material que se obtiene luego de mezclar agua, arena, grava y cemento en proporciones definidas. Así mismo, algunas compañías le adicionan a la mezcla algunos aditivos que permitan acelerar o retardar la velocidad de secado (un proceso mejor conocido como "fraguado") del hormigón.
Quizás el elemento más importante de la mezcla de hormigón es el cemento, ya que él funciona como aglomerante. Además, cuando el cemento se mezcla con una proporción adecuada de agua se produce una reacción que permite hidratar a toda la mezcla.
Posteriormente, el cemento se convierte en una especie de pasta que se caracteriza por ser altamente moldeable y por poseer propiedades adherentes que facilitan la incorporación de los elementos áridos (como la arena y la grava, por ejemplo) que se encuentran en la mezcla. Es decir, el cemento (el cual está formado, en esencia, por silicato cálcico hidratado) permite que los áridos se adhieran, lo que da como resultado que la mezcla de hormigón se forme de manera exitosa.
Comúnmente, el cemento que más se suele utilizar como aglomerante en la mezcla de hormigón es el cemento Portland. La principal característica de este cemento es que tiene la capacidad de formar una pasta que fragua y se endurece al entrar en contacto con el agua.
A pesar de que el cemento Portland es el más empleado para elaborar la mezcla de hormigón, existe un tipo de hormigón que se fabrica con otra clase de cemento, el llamado "cemento asfáltico". Por ello, este hormigón recibe por nombre "hormigón asfáltico" y es ampliamente utilizado para construir carreteras. Sin embargo, el hormigón asfáltico también difiere del hormigón tradicional en que posee betún en su mezcla (por lo cual, en general, suele ser un poco más costoso).
Igualmente, los áridos que se utilizan para preparar la mezcla de hormigón son la gravilla, la grava y la arena. Estos elementos aportan consistencia, resistencia y uniformidad a la mezcla de hormigón.
Como se mencionó anteriormente, también es posible adicionar ciertos elementos a la mezcla que permitan acelerar o retardar el proceso de fraguado. De esta manera se pueden obtener distintos acabados y resultados que se ajusten a las condiciones de la obra.
Actualmente, es posible encontrar en el mercado una amplia gama de estos elementos que aceleran o retardan el fraguado, así como también se pueden encontrar una gran variedad de colorantes. Por ello, con el hormigón es posible obtener diversos tipos de acabados que se ajusten a los gustos y necesidades de cada uno de los usuarios.
Sin embargo, si deseas agregar alguno de estos aditivos, debes tomar en cuenta que la cantidad de dicho elemento no puede excederse del 1% de la masa del hormigón, ya que de otra manera podrías afectar la integridad de la mezcla.
Finalmente, para preparar la mezcla de hormigón se deben agregar primero los áridos gruesos, seguido de los áridos finos, el cemento y la proporción adecuada de agua. En el caso de utilizar aditivos, estos deben agregarse con el agua. Posteriormente, se mezclan todos los elementos hasta conseguir una masa homogénea y compacta.
Luego de haber visto y comprendido la definición de hormigón, lo siguiente que debes saber son todas las ventajas que te ofrece este material de construcción. No en vano este material es uno de los favoritos a la hora de llevar acabo toda obra, y es que entre sus principales ventajas destacan las siguientes:
En la definición de hormigón destacamos la gran versatilidad y maleabilidad de este material. Debido a estas características, el hormigón tiene diversos usos y aplicaciones. Por ejemplo, por ser un material resistente al fuego, al agua y a las diferentes condiciones climáticas, el hormigón es muy utilizado para construir superficies exteriores, como terrazas, caminos, jardines, bordes de piscina, porches, etc.
Igualmente, el hormigón también es un material muy empleado en el sector industrial. Entre sus usos destacan la construcción de superficies grandes, como estacionamientos, autopistas, túneles o carreteras, así como la construcción de pisos de almacenes y depósitos (ya que el hormigón es sumamente resistente).
El hormigón también es ampliamente empleado para construir las bases de grandes estructuras, principalmente de edificios. Está comprobado que este material aporta estabilidad a las grandes construcciones, por lo que funciona perfectamente como base. Por otro lado, otra aplicación del hormigón es la fabricación de los techos de diversos tipos de viviendas.
También cabe destacar que este material también puede ser utilizado para crear superficies decorativas de casas, conjuntos residenciales o apartamentos. Además, con este material también se pueden fabricar distintos elementos decorativos (como fuentes, por ejemplo).
Así, tal y como se refleja en la definición de hormigón, este material es sumamente versátil y útil, por lo que posee una gran diversidad de aplicaciones y usos, las cuales se ajustan
perfectamente a las necesidades de cada uno de los usuarios.
Aunque las propiedades del hormigón pueden variar de acuerdo a la proporción de cada uno de sus componentes (los cuales son, recordemos, elementos áridos, cemento y gua), el hormigón posee al menos 4 propiedades distintivas, las cuales son: resistencia, durabilidad, impermeabilidad y maleabilidad.
La resistencia del concreto es una de sus propiedades más destacadas y mejor valoradas por los constructores, mientras que la durabilidad permite que material permanezca intacto durante mucho tiempo sin desgastarse o deformarse. Estas dos propiedades permiten que el hormigón sea capaz de resistir las diferentes condiciones climáticas (como altas humedades o fuertes incidencia de rayos solares, por ejemplo) y diversos agentes químicos (como detergentes).
Por otro lado, la impermeabilidad de este material también es valorada por muchos, ya que ésta confiere aislamiento térmico y acústico, a la vez que evita que el agua entre por los poros o se acumule. Cabe destacar que el grado de impermeabilidad del hormigón está directamente relacionado a la cantidad de agua que se le adicionó a la mezcla durante la preparación del material.
Finalmente, la maleabilidad del hormigón también es una propiedad muy distintiva y característica, sin mencionar que es de suma importancia. Gracias a esta propiedad, el hormigón es un material sumamente versátil y puede ser utilizado para realizar una gran variedad de obras de construcción.
El precio por m3 del hormigón puede variar de acuerdo a varios factores, como la cantidad de hormigón que utilizarás en la obra de construcción, el tipo de hormigón a emplear, la empresa que te suministrará el material y la zona geográfica donde te encuentres.
Por ejemplo, en general, en España el precio por m3 del hormigón oscila entre 40 y 50, aunque puede haber valores que se salgan de ese rango. A continuación te presentamos algunos tipos de hormigón y el precio por metro cúbico de cada uno de estos materiales.