Pavimento nave industrial

Los pavimentos para naves industriales distan muchos de ser los clásicos suelos hogareños. De hecho, es requerido que posean ciertas características que otros pavimentos no pueden emular. Los pavimentos de nave industrial son, por lo tanto, lo que usted necesita. Y aquí explicaremos todo lo que debe saber antes de proceder a una compra. 

La maquinaria pesada, los químicos corrosivos, temperaturas extremas y el tráfico excesivo son cosas que un suelo normal no soportaría. Otras veces, los pavimentos de hormigón comunes son demasiado rígidos, lo que conlleva a que se rompan bajo demasiada carga.

Es por eso que existen los pavimentos para naves industriales. Se trata, principalmente de cementos o resinas especialmente diseñados para soportar el trato de la industria.

• El primer beneficio del uso de pavimentos industriales es, claro está, su enorme resistencia química y mecánica. 
• Normalmente, estos pavimentos son también conocidos como suelos continuos, debido a la ausencia de juntas de dilación. Esto supone muchas ventajas de cara a la higiene y la limpieza. Al no tener ranuras, no hay espacio para que almacene la suciedad, además de que son muy fáciles de limpiar.
• Son impermeables, por lo que no habrá problemas en caso de derramamiento de líquidos.
• Son también ignífugos, por lo que no habrá problemas con fuego.
• Poseen una capacidad de adherencia sin igual, a pesar de ser considerablemente lisos. Esto evita accidentes de todo tipo. 
• Una cosa es soportar una carga gigantesca de peso, pero otra muy diferente es resistir frente a impactos. Y los pavimentos industriales son capaces de eso también. 
• Se instalan muy rápido, por lo que no habrá que parar el trabajo por mucho tiempo. 
• Un acabado estético es la guinda sobre el pastel. Los suelos brillantes y con gran variedad de colores son muy atractivos.

Existen muchísimos pavimentos para nave industrial. Pero, lamentablemente no todos son igual de efectivos o de tan alta calidad. Es por eso que hemos recopilado los cuatro mejores del mercado:

• Pavimento epoxi: En primer lugar, tenemos los pavimentos en base a resina epoxi. Como probablemente ya sepa, estas resinas proveen al suelo de una resistencia sin igual.  Son lo suficientemente flexibles para resistir impactos fuertes, pero, aun así, hacen un frente perfecto a la abrasión, los líquidos, el tránsito y los químicos. Al no tener ningún tipo de juntas, su limpieza se hace sumamente práctica. Y es por esta misma razón que no solo se usan en la industria, sino en hospitales, escuelas, súper mercados, etc. 
• Pavimento poliuretónico: Los pavimentos poliuretónicos son especialmente usados en aparcamientos y en exteriores con mucho tráfico pesado. Además, son la principal opción en cámaras de congelamiento o de cocinado, donde las temperaturas están entre los -40 y 130 grados centígrados o más. Pese a ser muy parecido a la resina epoxi, el poliuretano tiene una característica que le da un punto de más: su resistencia a los rayos UV. Y es esta otra de las razones por las que es tan usado en exteriores, donde no es deteriorado por el sol.
• Pavimentos de hormigón pulido: Cuando hablamos de hormigón pulido, no es simplemente eso. De hecho, la magia se produce cuando se le añaden pigmentos. Hay distintos grados de resistencia, pero los mejores usan pigmentos con litio junto con un mortero especial. Esta mezcla consigue darle al suelo una dureza increíble, lo que lo convierte en un suelo bastante popular. El litio provee resistencia mecánica, química y a la tracción. Además, los roces con objetos afilados o muy pesados, y los golpes, son nada contra este material. 
• Pavimento de hormigón fratasado: Por otro lado, tenemos los pavimentos de hormigón fratasado. La principal diferencia al hormigón pulido es que, en este caso, la textura es rugosa. Si bien no es la opción más utilizada, sí que se emplea en espacios industriales específicos. Al igual que otros suelos, éste resiste a la perfección el tránsito extremo, el peso, las altas temperaturas y los golpes. No obstante, su desventaja es que no es tan fácil de limpiar debido a su porosidad. 

Por último, a pesar de haber cientos de colores para seleccionar, los más comunes son el amarillo, el rojo, azul, gris y verde.

Es imposible dar un único precio por metro cuadrado de los pavimentos para naves industriales. Como bien sabrá, hay varios agentes en juego, como la extensión total a cubrir, la mano de obra, el tipo exacto de pavimento, etc.  No obstante, sí que podemos dar un estimado. El precio, por lo tanto, puede ir desde los 20 euros por metro cuadrado, hasta los 60 euros. Es, sin lugar a dudas, una inversión que vale la pena considerar.

Ahora, la pregunta más importante si ya se decidió a usar alguno de estos pavimentos: ¿cuál de todos elegir para una nave industrial? La respuesta es ambivalente, ya que puede ser tan sencilla como un “cualquiera” o tan profunda como un “depende”.

Es decir, si usted no tiene una empresa que utilice maquinaria pesada, que emplee temperaturas extremas o químicos corrosivos, use el suelo que más le plazca. Todos los que mencionamos antes, pueden soportar sin problema las exigencias de una empresa de este tipo. 

Aunque probablemente se decida por aquellos que sean fáciles de limpiar, es decir, por los pavimentos de acabado liso. O puede que le interese que resista a los rayos UV y al agua de lluvia. Por lo que, en este caso, usted necesitaría un pavimento poluiretónico, al menos en el exterior. 

Por otro lado, un almacén en donde hay mucho movimiento y cargas realmente pesadas, exige algo más. El epoxi puede soportar bien, dado su carácter flexible, pero lo mejor sería usar hormigón pulido y así evitar agrietaduras.  Si existe la posibilidad de resbalar, entonces es sencillo: lo mejor será un pavimento de hormigón fratasado o pulido.