Suelo para garaje

Comúnmente, los garajes están constantemente sometidos a diversas condiciones adversas (humedad, químicos, aceite de los autos, etc.) que pueden malgastar o deteriorar la superficie. Por eso, se hace indispensable contar con un suelo que pueda resistir los daños y permanecer intacto a lo largo del tiempo.

Un buen suelo para garaje protege la superficie, a la vez que brinda un acabado estético y único. Realmente, existen muchas opciones para este tipo de suelos, y en este artículo te contamos todo lo que debes saber al respecto.

El garaje es un lugar donde constantemente transcurren objetos que pueden dañar la superficie (como coches, herramientas pesadas o elementos para el hogar), ya que muchas personas utilizan este espacio como depósito, más que solo para guardar su coche. Sin embargo, a pesar de la utilidad de los garajes, muy pocas personas le dan a los suelos de garaje la relevancia e importancia que se merecen.

Los suelos para garaje son aquellos que se caracterizan por ser lisos, altamente resistentes, duraderos y que suelen ser utilizados para construir las superficies de áreas destinadas al almacenamiento de artículos, ya que poseen características específicas que aportan resistencia y durabilidad a la superficie.

En forma general, estos suelos son utilizados en espacio destinados para almacenaje (como los garajes y los almacenes, por ejemplo), en áreas de producción industrias y en el garaje de casas. También, debido a que este tipo de suelo es muy pulcro, muchos constructores lo utilizan como pavimento para clínicas, hospitales y asilos. A su vez, otros usuarios escogen este tipo de suelo para construir canchas deportivas (como las canchas de básquet, por ejemplo), o simplemente para pavimentar aquellos lugares que están constantemente sometidos a un deterioro intenso.

Existen una gran variedad de materiales disponibles y utilizados como suelo de garaje, cada uno de los cuales se ajustan a los requerimientos del espacio y a las necesidades de los usuarios. Realmente, el tráfico continuo al que está sometido un garaje hace indispensable la escogencia de un suelo que aporte resistencia y que no se desgaste tan fácilmente.

Estos suelos deben ser resistentes a la fricción originada por los neumáticos del coche, así como a la acción de químicos que puedan esparcirse (como el combustible o el aceite del coche, por ejemplo). Además, estos suelos también deben ser lo suficientemente duros y decorativos, de tal modo que perduren en el tiempo y sea fácil su mantenimiento y limpieza. Finalmente, también es recomendable que el suelo posea una adherencia óptima, lo cual permitirá evitar caídas y derrapes.

Escoger un buen suelo para garaje puede resultar una tarea un poco complicada si no se toman en cuenta los requerimientos de cada persona; pero no por ello deja de ser una tarea importante. Un buen suelo para el espacio de tu garaje puede garantizarte la comodidad y la seguridad que tanto necesitas.

Los suelos de garaje están constantemente sometidos a un alto tráfico vehicular, así como hay grandes pesos, por lo que es indispensable que estos suelos tengan una serie de características específicas para que la superficie no se malgaste ni se vea deteriorada con el paso del tiempo. En este sentido, las características de este tipo de suelos son las siguientes:

• Dureza. Debido a que por estos suelos transitan vehículos pesados y todo tipo de materiales de almacenaje, la dureza es una característica destacable de estas superficies. Esta dureza es capaz de resistir la fricción generada por los neumáticos del coche, así como también la acción de químicos, lo que garantiza que el suelo sea más duradero.
• Fácil limpieza y mantenimiento. Esta característica también es digna de destacar, ya que los materiales que se utilizan para construir los suelos de garaje proveen de una superficie pulcra, lisa y fácil de limpiar. Esto, a su vez, también garantiza la obtención de un suelo duradero.
• Adherencia óptima. Esta característica depende mucho de factores externos como la humedad, así como también de los distintos requerimientos de uso que tengan las personas. Poseyendo una adherencia óptima, este tipo de suelos provee de pulcritud y resistencia, a la vez que impide los derrapes de neumáticos o cualquier tipo de accidente (como caídas, por ejemplo). Se necesita, por tanto, que presente una elevada dureza y, al mismo tiempo, un acabado decorativo de fácil limpieza y mantenimiento. 
• Es antideslizante. Esta característica se relaciona con su adherencia óptima, y es indispensable para cualquier tipo de suelo de garaje.
• Resistente a altas temperaturas. Los coches suelen calentar la superficie donde se ubican, por lo que esta propiedad es indispensable. Se ha comprobado que este tipo de suelos puede soportar condiciones extremas de calor.
• Económicos. El uso de este tipo de suelos supone un ahorro económico considerable, ya que requieren de menos mano de obra (por ser de fácil instalación) y los materiales utilizados son muy económicos.

Existe una amplia gama de suelos para garaje, los cuales se ajustan a las necesidades de cada uno de los usuarios. Sin embargo, existen unos suelos que son más utilizados que otros, por lo que son más comunes. Estos son:

• Hormigón pulido: Los pavimentos para garaje elaborados con hormigón pulido se caracterizan por ser pulcros, lisos y con una alta capacidad de adherencia. Además, este tipo de suelos también aportan luminosidad a la estancia, lo cual es ideal para ambientes cerrados, como los garajes. Generalmente, el hormigón pulido es utilizado tanto en ambientes interiores como en exteriores. Esto se debe a que sus propiedades de resistencia y baja consistencia se ajustan fácilmente a una gran variedad de proyectos de construcción.
• Hormigón fratasado: Este tipo de suelo se caracteriza por ser un poco más rugoso y poroso que el hormigón pulido, pero a un nivel óptimo, de tal forma que previene caídas y derrapes sin desgastar los neumáticos. El hormigón fratasado se obtiene mediante el uso de una fratasadora, la cual adiciona rugosidad a la superficie y permite la obtención de un suelo fino, con porosidad intermedia. Este material es altamente resistente y duradero, por lo que es muy recomendable su uso como pavimento de garajes, zonas de almacenaje, etc.
• Suelo resina epoxi: Con el paso del tiempo, muchos suelos de garaje pueden deteriorarse y desgastarse, por lo que muchas personas optan por utilizar una resina epoxi como recubrimiento. Los suelos revestidos con resina epoxi  se caracterizan por ser elegantes, estéticos y únicos, a la vez que posee una mayor resistencia contra el desgaste. En este sentido, la resina epoxi normalmente es aplicada sobre otros materiales con el fin de renovar los suelos.
• Pavimento poliuretano: Los suelos de pavimento poliuretano normalmente son conocidos por su alta resistencia a los rayos ultravioletas ya las fuertes inclemencias del tiempo, por lo que este pavimento no solo es utilizado en garajes, sino también para construir superficies externas. El pavimento poliuretano se conoce por ser un tipo de cemento continua, el cual posee una gran resistencia mecánica y química. Además, es un material muy empleado para construir superficies expuestas a altas temperaturas, debido a su gran resistencia.

 A pesar de que los precios de los suelos para garaje varían mucho de acuerdo a factores como el área geográfica, la empresa constructora que suministrará el material, el tipo de material escogido (si es hormigón pulido, hormigón líquido, pavimento poliuretano, etc.), las dimensiones del área y la mano de obra, sí es posible estimar un precio aproximado para este material.

En este sentido, se puede decir que los precios por metro cuadrado de los suelos para garaje tienen un valor promedio que oscila entre los 15 y los 70 euros.

Como existe una gran cantidad de opciones, la escogencia de un tipo de suelo u otro va a depender de los gustos y necesidades de cada persona. Sin embargo, en líneas generales, muchos usuarios concuerdan en que hay que tener en cuenta una serie de factores a la hora de escoger el mejor material para su garaje, algunos de los cuales son:

• Versatilidad. Se debe escoger un suelo que no solo provea de resistencia y durabilidad a la superficie, sino que también aporte elegancia y estética al ambiente. Esto hará que su garaje luzca único.
• Tipo de proyecto a realizar. Definitivamente, el mejor suelo para garaje es aquel que satisface sus necesidades, por lo que a la hora de escoger el mejor suelo es necesario tomar en consideración el tipo de proyecto de construcción que se llevará a cabo. También es recomendable que tengas la mejor asesoría de expertos, lo cuales podrán orientarte en este sentido.
• Durabilidad y mantenimiento del suelo.  Un suelo de fácil mantenimiento y de gran durabilidad es ideal para cualquier garaje. Por eso, más que guiarte por los precios, es necesario que tengas en cuenta estos factores (ya, a la larga, también pueden ahorrarte cantidades importantes de dinero).