El hormigón drenante o poroso se caracteriza por formar una estructura granular compuesta de diminutos huecos que forman pequeños canales, lo que permite drenar o evacuar agua; evitando la formación de charcos en la superficie del pavimento.
Aunque su superficie es porosa, esta es firme, y a diferencia de otros tipos de hormigón y asfaltos, su alta porosidad debida a su bajo contenido en áridos finos es adecuada para la canalización y recogida de las aguas.
Este tipo de hormigón tiene una alta capacidad drenante que permite recoger y gestionar aguas pluviales, de esta manera su infiltración en el terreno puede reutilizarse en acuíferos naturales o para otros usos secundarios cuya función sea la de recuperar este preciado líquido.
Esto es de gran importancia, ya que el agua se nos acaba.
El hormigón drenante está formado por áridos triturados, pero con un diámetro máximo entre 12 mm.
Es decir, se fabrica de manera muy similar a la mezcla de hormigón tradicional, con la diferencia de que, por el tamaño de sus áridos presenta entre un 20-25% de huecos en su estructura, proporcionando una permeabilidad muy alta.
En cuanto a su consistencia, esta es fluida y trabajable durante unos 20 minutos. Se puede aplicar en el terreno sobre cualquier tipo de subbase granular, lo que permite una resistencia a la flexión 1-2 N/mm2 y una resistencia a la compresión de 10 a 15 N/mm2. Estamos hablando de un pavimento permeable 100% ecológico.
El hormigón drenante es una estructura de varias capas, compuestas por materiales granulares que proporcionan la distribución granulométrica que facilita la filtración de agua de lluvia.
Este tipo de hormigón es mucho más ligero que el hormigón tradicional y puede llegar a los 25 MPa de resistencia.
Otra característica importante es el hecho de que el hormigón drenante es compatible con cualquier tratamiento utilizado en la superficie.
Esto lo hace muy especial para ser usado en rellenos, pistas rurales, urbanizaciones, instalaciones deportivas, estacionamientos, zonas de lavados industriales o carreteras de tránsito ligero.
Aunque no requiere de la vibración debe ser compactado de preferencia con la ayuda de medios mecánicos.
Además, se puede aplicar en:
Otras aplicaciones interesantes es su uso en zonas ajardinadas, lo que facilita la eliminación del exceso de agua de riego o lluvia; evitando así los charcos y el libre acceso a paseos.
Ahora bien, tenga presente que la aplicación del hormigón drenante debe estar complementada por un sistema que conduzca el agua drenada, pues, de lo contrario, podría eliminar la capa de hormigón drenante, eliminando por completo su interesante propiedad.
El espesor y la porosidad del hormigón drenante podría variar en función a su uso. Este tipo de hormigón puede ser depositado fresco in situ con un camión hormigonero o seco.
Para elevar la porosidad de la masa de hormigón, se debe eliminar todo sedimento fino en la mezcla.
Permitiendo que el agua fluya a través de los diminutos huecos o agujeros hechos para drenar de manera efectiva la zona.
El hormigón drenante ofrece las siguientes ventajas:
Se debe buscar que la masa tenga una consistencia seca. Amasar bolsas completas, y se recomienda un amasado mecánico hasta obtener una pasta uniforme cuya consistencia no se desmorone al coger un puñado con la mano.
Es por esta razón que la proporción de agua debe ser la correcta, porque si le falta agua, el hormigón se deshace y si se utiliza agua en demasía puede perder su forma ahuecada y perderá su capacidad de drenaje.
No se debe aplicar el producto si el clima no es favorable, como vientos fuertes o lluvia. Tampoco bajo temperaturas inferiores a 5ºC ni superiores a 35ºC.
Esto es porque las temperaturas elevadas pueden acelerar el proceso de fraguado y las bajas temperaturas podrían retardarlo. Otra cosa, no se debe añadir agua cuando el producto inicie su fraguado.
No se deben usar para la mezcla de hormigón ni agua marina ni materiales de características dudosas.
Nuevamente recordamos que no se debe descuidar el incremento de la cantidad de agua en el amasado, pues implicaría obtener un hormigón de baja resistencia y pérdida de porosidad.
Se debe tener en cuenta las siguientes recomendaciones:
A la hora de diseñar su pavimento de hormigón drenante se debe tener en cuenta las medidas de los terrenos circundantes, de esta manera podemos prevenir el arrastre de materiales en su superficie.
Es necesario evitar la acumulación de tierra, hojas, piedras y otros materiales que podrían obstaculizar los huecos del pavimento, impidiendo de este modo el flujo de agua y disminuyendo su propiedad como pavimento drenante.
Al menos anualmente será necesario eliminar la suciedad de la superficie del pavimento. Su limpieza no es algo complicado, se puede realizar mediante el uso de aire o agua a presión, pero tenga presente regular la presión para no dañar la superficie del pavimento.
IMPORTANTE: No debe pintar ni dar ningún otro tratamiento que pudiese obstruir la porosidad de su pavimento de hormigón drenante.
Su precio puede variar, pues incluye preparación de la superficie, la ejecución de la zanja, ubicación, suministro y colocación de tuberías, relleno de materiales drenante, compactación de materiales, ejecución de juntas (si la obra lo requiere) y todas las operaciones necesarias para completar su ejecución.
Pero usted no debe preocuparse por estas cosas, pues podemos hacerle un presupuesto, sin compromiso alguno. Estamos para servirle.